La talla de un calzado varía dependiendo de la marca o lugar de procedencia.
Aquí te brindamos las equivalencias para el calce correcto.
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¿Cómo medir tu pie?
Para averiguar tu talla lo primero que tendrás que hacer es medir tus pies y para ello necesitarás tener a mano una regla o mejor una cinta métrica, hoja de papel y un lápiz o bolígrafo.
También es recomendable que midas tu pie al final del día, cuando estará más cargado y por tanto más expandido. Si lo haces a primera hora de la mañana podrías obtener resultados poco fiables.
1.
Pon la hoja de papel en el suelo, pegada a la pared (o al zócalo).
2.
Si vas a usar el zapato con medias, ponte las que suelas usar.
3.
Ponte de pie sobre la hoja, con los pies juntos y talones pegados a la pared.
4.
Marca con el lápiz ( ¡o pide ayuda! ) hasta dónde llega tu dedo más largo.
5.
Toma la hoja y mide la distancia desde el borde hasta la marca de lápiz.
6.
Multiplica esta medida en cm, por 1.5, y tendrás tu talla. Por ejemplo, si tu pie mide 23cm x 1.5 = 34.5. Tu talla sería la 35 en talla.
Ahora mide también el ancho. Para eso pasa la cinta métrica por debajo de la planta del pie y rodéalo por la parte más ancha de la planta con el pie apoyando en el suelo. Haz este proceso con los dos pies porque es posible que haya diferencias de medida entre tus pies. Si esto ocurre, a la hora de elegir tus zapatos, elige siempre los que mejor vayan con tu pie más grande.
Cuando ya tengas las medidas de ancho y largo, podrás comprobar tus medidas con la tabla de medidas de cada uno de nuestros calzados para saber cuál es tu talla exacta. Si no encuentras los valores exactos, elige la talla que esté inmediatamente por encima de tus medidas, nunca una más pequeña.